Aidan Baker & Gareth Davis

¿Qué fue lo que motivó esta colaboración entre ustedes?
La colaboración surgió de una invitación mutua para explorar nuevas texturas sonoras donde el drone ambiental y el clarinete bajo dialogaran libremente. Ambos compartimos una afinidad por el proceso improvisado y una aproximación similar a lo atmosférico desde nuestras respectivas perspectivas instrumentales.
¿Cómo describirían el sonido que lograron juntos?
Es un sonido que fluye como un continuo, con capas que se suman y descomponen lentamente. Hay una constante tensión entre lo estructurado y lo espontáneo. La mezcla del clarinete de Gareth con los loops de guitarra y efectos de Aidan produce una paleta rica en matices y densidades.
¿Hacia dónde quisieran que se encamine esta colaboración en el futuro?
Nos gustaría seguir explorando directamente en estudio o en presentaciones en vivo, con grabaciones que capturen esa intimidad sónica. Pensamos que aún queda terreno por descubrir en términos de ritmo interno y silencios compartidos. La relación musical es muy orgánica.