R.A.N.
¿Cómo fue el proceso de creación de “GNOSIS”?
“GNOSIS” se gestó en un periodo muy particular de mi vida. Después del lanzamiento de mi primer álbum había estado de gira constantemente y, al mismo tiempo, estaba comenzando a desarrollar ideas para nuevas piezas. Lo que resultó ser “GNOSIS” se formó gradualmente, en un proceso donde me permití experimentar con sonidos y estados mentales, y después discerní un hilo narrativo que los conectara.
La palabra “Gnosis” hace referencia al conocimiento espiritual. ¿Qué papel juega ese concepto en tu trabajo?
Siempre me ha intrigado la relación entre el conocimiento interior, la experiencia sensorial y la práctica artística. Este álbum explora esas conexiones desde una perspectiva muy personal. La “gnosis” en este caso no es un punto de llegada, sino un proceso de transformación, de entender el mundo desde nuevas formas de percepción.
Musicalmente, “GNOSIS” suena sombrío, atmosférico, pero también con una fuerza rítmica muy marcada. ¿Qué referencias musicales y sonoras manejaste?
Diría que el trabajo se alimenta tanto de mis raíces en la música experimental y electroacústica como de formas de percusión ritual. Hay influencias de sonidos del Medio Oriente –que forman parte de mi herencia–, así como una fascinación creciente por estructuras rítmicas densas y texturas atmosféricas. Trabajé con grabaciones de campo, sintetizadores, procesamiento digital y algunos instrumentos acústicos para lograr ese universo sonoro.
Hay momentos en que la música se torna muy física, casi corporal…
Me alegra que lo digas. Parte fundamental de mi trabajo tiene que ver con el cuerpo, con cómo las frecuencias y los ritmos interactúan con nuestras emociones, con nuestras reacciones físicas. El cuerpo es tanto un receptor como un generador de conocimiento.
¿Cómo influye tu formación en psicología en tu trabajo artístico?
Influye enormemente. Mi formación me brinda una lente desde la cual puedo abordar la música no solo como una forma de arte, sino también como un medio para cuestionar, entender y transformar estados interiores. Me interesa mucho el potencial terapéutico y simbólico del sonido.
¿Qué esperas que experimente quien escuche “GNOSIS”?
Cada oyente tiene su propia historia, por eso me interesa más abrir preguntas que entregar respuestas. Me gustaría que quien lo escuche pueda detenerse, escuchar(se), permitir que el sonido lo afecte de manera no lineal. Que sea una experiencia de introspección, tal vez incluso de confrontación.
