Tim Linghaus

¿Cómo nace “We Were Young When You Left Home”?
Este disco nace de una pregunta: ¿puedes desaprender la infancia? Siempre me ha interesado la memoria, las percepciones, emociones y mecanismos que forman lo que recordamos. En este caso, me enfocó en la infancia, ese momento potente, vulnerable, formador. Así, comencé a escribir piezas muy simples al piano, con loops y capas que evocan a un niño recordando a su madre, a su hogar, a su infancia.

¿Qué elementos musicales usaste para construir esta narrativa tan emocional?
Hay capas de grabaciones de ambientes reales, voces, instrumentos reales procesados, todo con intención minimalista. También está la voz de un niño que narra ciertas emociones; en varios pasajes se mezclan grabaciones lo-fi con pasajes más hi-fi. Todo eso es parte de la estética emocional que buscaba lograr.

¿Dirías que este disco se siente distinto al resto de tu discografía?
Sí. “We Were Young When You Left Home” es mucho más narrativo. Hay una historia muy definida. Tiene título de película. Imágenes potentes. Sentimientos muy crudos. Es un trabajo conceptual, pero también muy personal. En otros discos trataba de mantener cierta distancia. Aquí, no.

¿Sientes que el oyente necesita saber esta historia para conectar con la música?
No necesariamente. Pero ayuda. No quiero imponer una interpretación. Muchos relatos pueden esconderse bajo esta música. Puede evocar tristeza, cariño, melancolía, incluso esperanza. Cada quien proyecta su propia historia.

¿Planes futuros?
Estoy escribiendo música para una obra de teatro. Luego, quiero seguir creando desde emociones profundas. La música tiene esa capacidad de conectar lo interno de una manera visceral. Y eso es lo que quiero seguir haciendo.